LA OBRA ARTISTICA DE ANGEL ATIENZA

 

Angel Atienza, un largo trayecto de vida, de aliento por y para el arte-hombre-artista-trabajador, destinado al fluir impetuoso e inevitable de la creatividad más intuitiva y original. Elementos primitivos y nuevos como vidrio, cerámica, hierro, cemento... han llenado bastantes años de obras poco comunes. Rara vez un arte como el suyo ha sabido hermanarse y fundirse con la arquitectura para el logro de un fin común: la belleza. Cuando las ciudades son frías y los habitáculos humanos son fríos, y los seres humanos, encajonados en cercos y objetos, son fríos este hombre tiembla porque su dimensión humana se encuentra en la luz, el color, en la armonía de la forma y en la vida.

 

El arte de Angel Atienza, a caballo entre la escultura y la pintura, es portador de calidad y de poesía. A los elementos mas duros y resistentes que la construcción nos ofrece hoy, el hierro y el cemento, asocia un catalizador tan frágil y bello como es el vidrio, tratado con la creatividad de la mente y el amor de las manos. Simultáneamente, nunca abandona la expresión artística más pura reflejada en sus pinturas.

  

Angel Atienza aporta un arte primitivo porque surge directamente del hombre y nuevo porque sus premisas van más allá de la misma materia.